Planificar para la individualización: Una mirada más profunda

Adulto y niño pequeño dibujando en la sección de hormigón del patio de juego al aire libre.Cuando el personal considera cómo promover el desarrollo y el aprendizaje de cada niño, utilizan el alcance y la secuencia de su currículo para planificar entornos de juego, interacciones y rutinas. También lo utilizan para determinar experiencias de aprendizaje que coincidan con los intereses y niveles de desarrollo de cada niño y así aprovechar sus experiencias lingüísticas y culturales.[1] El personal puede utilizar otros recursos curriculares que proporcionan orientación para configurar y modificar los entornos de aprendizaje, la creación de horarios y la realización de cuidados de rutina, como el cambio de pañales y las comidas. Las familias también pueden tener sugerencias y preferencias que reflejen sus prácticas diarias en el hogar, el idioma y la cultura. Además, los bebés y los niños pequeños se benefician (¡y disfrutan!) de la repetición, la práctica y la familiaridad. "La exposición repetida a oportunidades familiares les ofrece a [los bebés y los niños pequeños] la oportunidad de darles sentido a sus experiencias y crear [una] base que apoye el aprendizaje posterior". [2]

Para bebés y niños pequeños con posibles retrasos o discapacidades diagnosticadas, el currículo puede recomendar cómo modificar entornos, interacciones, experiencias de aprendizaje, rutinas, transiciones y horarios para satisfacer las necesidades específicas de los niños. Los líderes educativos, el gerente o coordinador de servicios de discapacidades, los profesionales de salud mental y los especialistas o terapeutas de intervención temprana también pueden tener sugerencias. Las familias de los niños y los Planes de Servicios Familiares Individualizados (IFSP, sigla en inglés) también son fuentes adecuadas para esta información.

Además del alcance y la secuencia, los currículos de visitas al hogar suelen ofrecer orientación sobre cómo asociarse con las familias para apoyar el aprendizaje de los niños en el entorno familiar, con experiencias de aprendizaje recomendadas e interacciones entre padres e hijos. Estos currículos también pueden proporcionar orientación sobre cómo involucrar a las familias para apoyar el desarrollo y el aprendizaje de su hijo durante las actividades de socialización grupal. Los visitadores del hogar desempeñan un papel activo en el uso de la guía y los materiales curriculares de su programa con las familias para promover entornos de aprendizaje, experiencias de aprendizaje e interacciones entre padres e hijos que respondan al desarrollo, el aprendizaje y los intereses de un niño.

Buena planificación en todos los entornos:

  • Incluye oportunidades para fortalecer la relación entre el personal y las familias y las conexiones entre el hogar y el programa y las familias y los niños.
  • Profundiza en la comprensión de cada niño y familia e incluye los aportes de la familia y las observaciones sobre sus hijos.
  • Garantiza que las interacciones y la creación de relaciones, las rutinas, los horarios diarios, las experiencias y los entornos físicos aborden los intereses, las habilidades, las necesidades y la comprensión de las personas y los objetos del entorno.
  • Garantiza que continúe la planificación provisional para aquellos niños que están esperando los resultados de las evaluaciones para determinar si tienen alguna discapacidad.
  • Garantiza que la cultura de los niños y el idioma del hogar se aborden y apoyen adecuadamente.
  • Facilita el desarrollo y el aprendizaje de los niños en los dominios del Marco de Head Start sobre los resultados del aprendizaje temprano de los niños (ELOF, sigla en inglés) y apoya su progreso hacia las metas individuales de los niños, incluidas las metas del IFSP para niños con discapacidades[3].

En cada visita al hogar, Heath (una visitadora del hogar) da un paseo con Jamie y Eric, su hijo de 28 meses, alrededor de la cuadra. Cada vez que dan este paseo, se detienen en una esquina y escuchan el tintineo de las campanillas de viento que se produce cuando el viento sopla lo suficientemente fuerte. El sonido siempre hace reír y aplaudir a Eric. Escuchar y etiquetar sonidos en el entorno fue una actividad de conciencia fonológica temprana recomendada en el currículo basado en el hogar, y rápidamente se convirtió en una de las favoritas para terminar la experiencia de aprendizaje planificada de cada semana. Hoy, cuando Heath llega, le pregunta a Jamie si Eric y ella han notado las campanillas en su recorrido y qué es lo que ella dice cuando las oyen. Hoy, antes de que salgan a caminar, Heath anima a Jamie a preguntarle a Eric qué cree que sucederá durante el paseo. Jamie pregunta: "¿Crees que escucharemos las campanillas hoy, Eric?". Eric se queda quieto y presta atención. En ese momento, sopla un viento suave, y Eric dice emocionado: "¡Campanillas, campanillas, escucho campanillas! ¡Hacen 'tilín, tilín' "! Jamie dice: "¡Yo también los escucho!". Ella pregunta: "¿Sabes lo que hace que las campanillas hagan el sonido de 'tilín, tilín' "? Eric ha practicado mucho con esta pregunta. Primero, junta los labios y sopla, y luego responde: "El viento, mamá. ¡Sopla el viento!".

1]Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Administración para Niños y Familias, Oficina Nacional de Head Start, Centro Nacional de Desarrollo, Enseñanza y Aprendizaje en la Primera Infancia, Using Scope and Sequence to Plan Responsive Learning Experiences for Infants and Toddlers (en inglés) [Cómo usar el alcance y la secuencia para planificar experiencias de aprendizaje receptivas para bebés y niños pequeños] (Washington, DC, n.d.), 4.

[2]Iniciativa Nacional de Cuidado Infantil para Bebés y Niños Pequeños, Infant/Toddler Curriculum and Individualization (en inglés) [Currículo e individualización para bebés/niños pequeños], página 28.

[3]Departamento de Educación de California, California Infant/Toddler Curriculum Framework (en inglés) [Marco del currículo de California para bebés/niños pequeños] (Sacramento, CA, 2012), páginas 42 a 44.